No
sé si amaste las sombras de mi silueta
si
soñabas con mis cabellos arrebatados por el viento
si
con suspiros recuperaste mis recuerdos
no
sé si entre notas y versos alguna vez me quisiste
si
con ferviente devoción me elegiste entre doncellas
si
con fervorosa pasión sentiste el calor de mi piel
desnudándome
en la ignota neblina de la aurora
no
sé si fui o no fui en las mil aventuras, historia
si
con la descalza andanza de mis palabras
regocijaste
tu varonil presencia en algún resquicio de mi vida
si
retozaste en tu almohada respirando mi aroma…
No
sé si olvidaste las piedras que nos golpearon
si
a pesar de escalabrados momentos nos
encontramos
no
sé si algún día, fundimos el sabor de nuestros labios
y
es que aún hay polvo sobre los mil abecedarios
que
recorrieron tu esencia sobre las victorias
sobre
los fracasos de las cifras finitas de la gloria
donde
ni siquiera existe un diario que sostenga los olvidos
porque
tu nombre se quedó escrito en los capullos
en
las flores de mi jardín donde nacen fuentes
donde
se escalan tallos y hojas rebosantes de aromas
donde
borrarte será imposible aunque yo pase a la historia.
No
sé si aquello que soñé en la lucidez de mi mente
feneció
un poco en el desequilibrio de mis pies confundidos
agitando
el infarto de los segundos en los brazos de la muerte.
Febrero
20 de 2014
12:09
a.m
